El pensamiento y la pedagogía crítica plantean un escenario de acción en el que intervienen como actores, tanto a nivel local como a nivel global, los principales elementos de nuestra sociedad, desde la labor de los docentes en las escuelas y universidades, pasando por el ámbito privado de las familias, y terminando en el espacio público ocupado por políticos o actores sociales y por supuesto los medios de comunicación.
Hay dos ámbitos en los que es especialmente interesante ver la evolución del pensamiento crítico. Los movimientos sociales y los medios de comunicación.
Movimientos sociales/sociedad civil: Los movimientos sociales, como no podía ser de otra forma, se han convertido en la cabeza de lanza de la sociedad civil a la hora de reivindicar el pensamiento crítico y de aplicar las metodologías de la pedagogía crítica en la construcción de una sociedad más justa y solidaria, y es a través de ellos que se han producido las experiencias más estimulantes, y se han llevado a la práctica los modelos propuestos por los grandes teóricos en la materia.
Medios de Comunicación: En este ámbito nos encontramos con un conflicto fascinante, por un lado el papel que juegan los medios de comunicación en la expansión del pensamiento único, monocorde y monolítico. Y por otro el potencial extraordinario que tienen como herramienta para el ejercicio del pensamiento crítico, unido a las nuevas oportunidades que nos ofrecen las Web2.0/redes sociales/TIC, y que nos presentan un nuevo marco para la experimentación y el desarrollo de las corrientes críticas del pensamiento y la pedagogía.